05 septiembre 2010

Burbujas

Tengo pocos minutos hasta que aparezcan. Mientras leo frente a mi escritorio, pasarán unos minutos y unas burbujas afeminadas se apoderarán misteriosamente de mi área de trabajo. Se aparecen como una alucinación macabra que sólo los payasos callejeros pueden axplicar, son burbujas, impalpables, como todas las burbujas.
Efímeras las burbujas por arte de la desesperación humana por acabar con su vida. La de las burbujas.

Una burbuja no es poca cosa como se puede creer. Es bastante más de lo que logra en su vida y tiene un poder invisible más fuerte y tiránico de lo que el ser humano considera. Me atrevo a decir que vivimos en un mundo signado por las burbujas, no crean que estoy loco, como diría Poe cada vez que abría la boca. Demostraré que no estoy loco, que no perdí la razón y demostraré que las burbujas ejercen un poder casi absoluto sobre el comportamiento accidental.